Resumo:
La salud es un estado del individuo y, en su dimensión social, del conjunto de la población. La Organización Mundial de la Salud —OMS—, en su XXX Asamblea, celebrada en 1977 en Alma — Ata, en la que se adoptó la estrategia de «Salud para todos en el año 2000», define la salud como: «un estado de bienestar físico, mental y social, y no consiste sólo en la ausencia de enfermedad»1. La definición de la salud adoptada por la OMS contiene varios conceptos que convienen subrayar: • La salud no se define negativamente como la «ausencia de enfermedad», sino positivamente como estado de bienestar. Estar sano no es sólo no estar enfermo, sino poder desarrollar dentro de la sociedad todas las potencialidades del individuo. • La salud no se corresponde solamente con los aspectos biológicos
y psicológicos de los individuos, sino también con los de carácter social. Una política de salud como la definida por la OMS, conceptualizada desde la perspectiva holístico—humanista, se corresponde con el conjunto de la política social, y aun la trasciende si se toman en cuenta el conjunto de determinantes de la salud. • No puede establecerse un patrón objetivo de salud, pues el estar sano está determinado social y psicológicamente, es decir, por patrones culturales e individualmente subjetivos, y no sólo por parámetros
biológicos objetivos.
Como citar:
OLEA, Pelayo Munhoz; "CONCEPTOS DE SALUD E HISTORIA DE LA SANIDAD EN ESPAÑA", p. 101-142. El Sector Sanitario Público de Catalunya como Sistema de Innovación. São Paulo: Blucher, 2017.
ISBN: 9788580391510, DOI 10.5151/9788580391510-04